Visión
Siempre queremos hacerlo muy bien, ser eficientes, inteligentes, exitosos. Buscamos la perfección.
Nos esforzamos por ser capaces y tener el control de la situación.
Sin embargo, el clown vive en el fracaso, en el error y en el ridículo. Justamente allí, donde podemos sentir vulnerabilidad o incomodidad, el clown encuentra su fuerza y su libertad.
En los talleres de Clown, a través de juegos, dinámicas e improvisaciones, nos encontramos con el error, el riesgo y el ridículo. Y al dar ese paso, descubrimos algo mucho mas profundo: la libertad de ser nosotros mismos, de mostrarnos de un modo auténtico, sin juicio y sin censura, de explorar nuestra creatividad, y nuestra espontaneidad junto a un grupo que nos sostiene.
En mis cursos te invito a descubrir tu Estado Clown, un estado de juego, de presencia y de honestidad para conectar contigo mismo y con el público.
Porque cuando tú brillas, el público brilla contigo.
Enfoque
No es tanto lo que haces, sino lo que eres.
El viaje emocional que transita el Clown, nos conecta directamente con nuestras emociones como público, y es ese el lugar en el que se encuentra la magia, donde se establece la conexión.
Parto desde la premisa de que no hay forma de hacerlo mal, tan sólo hacerlo desde tu verdad.
Mi intención es potenciar tus capacidades expresivas y que transites tus emociones para jugar con ellas, sorprenderte, y así aportar nuevos matices al Clown que te habita.
Tomando conciencia de tus impulsos físicos, sensaciones, gestualidad y expresividad para darles espacio y que abarquen todo tu ser.
Metodología
Las clases se dividen en tres secciones: Juego, Técnica e Improvisación. Sin embargo cada sección se interrelaciona en todo momento, ya que la espontaneidad y la libertad son los protagonistas principales.
El Clown no toca la puerta para entrar; más bien, nos invade cuando damos el espacio para que suceda.
En el juego, procuramos conectar con el aquí y ahora, dejar la mente descansar para conectar con el cuerpo y la acción. Durante la técnica, transitamos la emocionalidad para alimentar nuestro estado y tomamos conciencia del ritmo y timing cómico de la situación.
Finalmente, en improvisación, nos disponemos a crear escenas integrando todos los elementos.